11 Saltar al contenido

Mi novio se hace el gracioso mostrando mis nalgas y mi coño

Todo se debió, a consecuencia de una gran borrachera que agarré en la fiesta patronal del pueblo.

Pero el responsable de que eso sucediera fue el cabrón de mi novio, el muy hijo de la gran puta dejó que me emborrachase como una perra.

Es más, en esos momentos él no dejaba de darme una cerveza tras otra, así que cuando él me pidió que nos fuéramos a un local del cual él tenía la llave, le dije que sí.

Ya dentro, una vez que cerramos la puerta, nos comenzamos a besar, mi novio sin demora alguna me comenzó a quitar toda la ropa, lo que realmente no era mucha.

Aparte de mis pantis debajo de mi ropa no llevaba puesto más nada, en esos momentos usaba una mini y un pequeño suéter de lana.

Al dejarme completamente desnuda, me insinuó que le mamase su miembro, lo que, en esos momentos a diferencia de otras ocasiones, no me pareció nada malo o indecente.

Así que completamente desnuda comencé a lamerle todo el glande, y a los pocos segundos ya me encontraba con todo su miembro dentro de mi boca.

Hasta que a él se le antojó que me pusiera en cuatro, y mientras me acariciaba el coño, me fue enterrando toda su verga dentro de mí depilado coño.

Por un buen rato, me hizo disfrutar de lo lindo, entre besos, caricias, cambios de posición en fin hicimos una pequeña orgía entre nosotros dos solos.

Hasta que, en medio de mi excitación, por estar del todo desnuda en ese vacío local, teniendo un sexo desenfrenado con él, disfruté de un tremendo orgasmo.

Mientras que mi novio no se detuvo hasta que finalmente dejó de correrse por completo dentro de mi coño.

Bueno hasta ese momento todo iba de maravilla, pero al terminar de vestirme comencé a sentir como su semen comenzó a chorrearse entre mis muslos.

De manera automática, agarré mis pantis y me limpié completamente mis muslos, y como comprenderán no me iba a volver a poner ese panti sucio.

Por lo que el resto de la noche seguí con mi coñito al aire, apenas oculto por la mini que usaba.

Antes de salir del local, fui al baño, como pude me lavé y regresé con mi novio que me esperaba fuera, ya que me dijo que nos íbamos a reunir con sus amigos en la plaza del pueblo.

Pero el muy desgraciado, por hacerse el gracioso con sus amigotes, apenas llegamos y seguimos bebiendo, comenzó a levantar mi falda frente a sus amigos.

Claro que me vieron no tan solo todo mi culo, sino que también gran parte de mi depilado coño.

Al principio lo que hizo mi novio me molesto un poco, pero después de que seguí bebiendo más cervezas, comencé a tomar eso, de dejar que me vieran las nalgas y mi coño, como si fuera una gran gracia.

Por lo que yo misma, o me levantaba la falda, o me sentaba de manera tal, que fácilmente todo el que pasaba frente a mí, se me quedaban viendo, con sus ojos clavados en mi desnudo coño.

Gran parte de la noche hice eso, mientras que mi novio que se reía como un tonto, de lo borracho que se había puesto.

Hasta que uno de sus amigos, me tomó por el brazo y haciéndome señas que nos quedásemos en silencio, ya que mi novio se había quedado dormido.

Yo me dejé llevar por su amigo y en el callejón tras del bar en que nos encontrábamos me comenzó a besar, yo que estaba tan borracha que ni tan siquiera me opuse.

Al poco rato, ya me tenía tirada sobre unos cartones, con mis piernas bien abiertas recibiendo toda su verga dentro de mi coño.

En ese momento estaba disfrutando tanto, y me sentía tan y tan bien, que poco me importó de quien se tratase.

Tanto su amigo como el resto de los otros chicos, esa noche en ese callejón hicieron conmigo lo que se les dio gusto y gana, mientras que yo de lo borracha que me encontraba, únicamente disfrutaba de todo aquello que ellos me hacían.

Movía mis caderas de lado a lado, al tiempo que uno me estaba dando hasta por el culo y a otro se la mamaba, en fin estaba hecha toda una puta esa noche.

Esa noche creo que hice de todo, hasta terminé masturbando a un gordito que era la primera vez que veía, al tiempo que yo misma me autosatisfacía acariciando toda mi vulva y apretando mi clítoris con mis dedos.

Cuando me desperté en la mañana, no podía creer que yo hubiera hecho todo eso, ya que me acordaba de todo lo sucedido, pero al mismo tiempo me sentía de lo más satisfecha.

Pero me di cuenta de que prácticamente estaba desnuda, mi falda estaba toda sucia de tierra semen y quien sabe de qué otras cosas más, al igual que mi suéter, el dolor de cabeza que tenía era tremendo.

Todo mi cuerpo apestaba a sudor, a sexo, y hasta orines, por suerte me encontraba cerca de la casa de mis padres, donde apenas llegué sin que ellos me vieran, me di un buen baño, y después de eso tal como me estaba me acosté.

En la tarde cuando después de que dormí lo suficiente, salí a buscar a mi novio, él muy cabrón apenas me vio, me insultó llamándome puta, por haberme acostado con todos sus amigos.

Mientras que él se había quedado dormido, esa tarde terminamos, no sin antes decirle que él culpable de todo lo era él.

Desde mi punto de vista, entiendo que el responsable de todo lo que me pasó lo fue él, por ponerse a beber sin control, y dejar que yo también bebiera mucho, además de hacerse el gracioso, mostrándole mis nalgas a sus amigos.

Pero como a la semana nos volvimos a reconciliar, aunque creo que desde esa vez agarró la mala costumbre de emborracharse, y comenzar a mostrarle a sus amigos mi culo.